Tras varias noches infernales de calor, sin poder/deber abrir el observatorio, ayer bajaron algo las temperaturas. Al menos lo suficiente para decidirme abrir y poder acabar el asteroide que llevaba en liza desde noches atrás. Con todo, la temperatura no bajó en toda la noche/madrugada de los 29 ºC.
Según las efemérides calculadas, el mínimo de la curva fotométrica que faltaba, se produciríaa casi justo sobre el mismo meridiano, lo que suponía un serio problema para mi montura, que como todas las ecuatoriales alemanas, tienen el "inconveniente" del paso del meridiano y la rotación de campo. De modo que lo seguí antes del paso y posteriormente tras él, con idea de no perder ese tramo que faltaba. Obviamente quedaría un hueco en la curva de la noche, pero con suerte, cogería el mínimo. Hubo suerte, aunque por los pelos:
Completado ese tramo, los informes de las 7 noches pudieron reconstruir la curva final y determinar así el periodo de rotación, que ante mi sorpresa, NO ha cambiado desde las observaciones del año 2006. Se mantiene en unas 10.25 horas.
El resto de la noche se dedicó al seguimiento de los últimos cometas (sin sorpresa destacable en ninguno de ellos) y la incorporación a la cantera de seguimiento del 67P
Después de todo, la noche no fue mal. Eso sí, sobraron por lo menos, del orden de 15 ºC.
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