sábado, 12 de agosto de 2023

Europlanet: otra experiencia en Calar Alto.

Tras la pasada experiencia en el observatorio de Calar Alto, en el mes de Junio, junto a mis queridos compañeros y amigos Faustino García (de Asturias) y Juan-Luis González (de Extremadura), decidimos presentar un proyecto de observación de los asteroides Lafontaine y Anguita a Europlanet, en el mismo observatorio, en las fechas del 7 al 10 de Agosto, donde suponíamos que el meteorológico jugaría a nuestro favor. 

La elección de esos asteroides no era fruto del capricho, sino que ya habíamos visto que (tal vez) por poseer magnitudes cercanas a la 17, sus datos no eran actuales (caso del Aguita) y/o simplemente, no existían (Lafontaine). El documento "justificativo" presentado como proyecto a Europlanet hacía hincapié en eso, y finalmente fue aprobado. 

Aprovechando que mi querido amigo Jose María Fernández andaba de vacaciones por Carboneras, y que el observatorio de Almería lo pillaba casi a un tiro de piedra en coche, lo invitamos a que subiera al observatorio, si bien él se regresaba en coche al finalizar las sesiones de observación.



Llegamos al observatorio a eso de las 3:15 h de la tarde del lunes día 7, y tras el oportuno descanso e instalación en las respectivas habitaciones, paseamos un poco al fresco de la tarde, alrededor de las cúpulas, y acto seguido nos fuimos a la biblioteca, que sería nuestra "sala de control". Nos llamó poderosamente la atención, que en pleno mes de Agosto hubiera mantas y edredones en la cama. Luego ya vimos que no sobraban: la temperatura a casi 2200 m del altitud, no era la misma (ni mucho menos) que "a pie de tierra", y las usamos. 


A eso de las 8 de la tarde, ya estábamos familiarizándonos con el uso del telescopio de 1,23 m, apertura y manejo de la cúpula, la cámara CCD y sus sistema de refrigeración, sistema FTP para la descarga de archivos, rueda portafiltros, escritorios remotos varios y variados, etc.... Esas labores "venían descritas en el manual" que la organización del observatorio nos había hecho llegar, y que previamente habíamos leído. Pero claro, una cosa es leerlo, y otra es verlo en "directo". En ese sentido, los astrónomos de soporte nos echaron una mano. Especialmente agradecidos estamos a Marco Azzaro, que fue uno más de nosotros.

Obviamente, nuestros habituales horarios sufrieron un notable cambio: toda la noche a pie de ordenador controlando operaciones, y durmiendo luego hasta casi las 2 de la tarde, para repetir la historia al día siguiente.






El meteorológico no se portó todo lo bien que hubiéramos querido, y de hecho, la segunda noche -que teníamos previsto dedicarla a observar Anguita- a duras penas pudimos observar "a tropezones", un par de horas, pues las nubes se interpusieron en las sesiones (de todos los telescopios de CAHA). Ya por la tarde "lo estaban avisando".


Por la mañana, Marco nos mostró algunas instalaciones: las del propio telescopio de 1,23 m que estábamos usando, y las del 3,5 m.


Muy pronto aprendimos a hacer flats de cúpula, darks, bias, mover la cúpula y la rueda portafiltros,  controlar la temperatura de la CCD, o quitar/poner "los pétalos" que protegen el espejo principal. Así en la última noche, se nos pidió -por parte del propio observatorio- que probásemos un nuevo sistema de refrigeración de la CCD iKon que estábamos usando, y que conseguía enfriar el sistema hasta los -60ºC, en lugar de a los -38ºC con la que habíamos trabajado noches anteriores. Las diferencias en las imágenes no tardaron en aparecer. No pudimos resistirnos a "dar unos tiros" a la SN2023ixf en M101.


El sistema de guiado del 1,23 m nos decepcionó bastante. Así que, finalmente, optamos por no usarlo, haciendo exposiciones de 3 minutos máximo (en filtro V) para el pedrusco Lafontaine, y algunos objetos más que "se pusieron a tiro".

Tras "el almuerzo/cena" de las 6 de la tarde, solíamos comentar resultados y estrategias para la noche a la que nos enfrentaríamos.


Los resultados obtenidos para el asteroide Lafontaine, no son del todo concluyentes. Creemos que ha de poseer un periodo bastante largo (entre las 13 y 25 horas), con una muy muy baja amplitud (no más de 0,2 unidades). En la última noche habíamos depositado las esperanzas de cerrar la cuestión, pero la calima hizo cerrar todos los telescopios de Calar Alto, a eso de las 4:45 h de la madrugada (la calima hace que se deposite polvo en los espejos de los telescopios). Con todo, los datos de la astrometría se enviaron al MPC, si bien los definitivos de fotometría se harán en breve al ALCDEF.  Del mismo modo, ya estamos trabajando en un artículo para el Minor Planet Bulletin con los resultados (preliminares o no) del asteroide Lafontaine. Intentaremos zanjar la cuestión de su periodo definitivo desde algunos observatorios "caseros". Ya hemos pedido colaboración a algunos compañeros que por estar en otras latitudes, poseen unas temperaturas "menos agresivas" que las que estamos padeciendo en latitudes andaluzas y extremeñas.

Al margen de los resultados, lo mejor de todo ha sido la experiencia de estar en contacto y uso de instrumentación profesional, el ambiente de trabajo, silencio y concentración, el roce y la charla con los astrónomos profesionales del observatorio. 

Pero lo que no tiene precio, ha sido la convivencia de estos tres días con Faustino, Juan-Luis y Jose María. Echaré de menos las conversaciones, paseos, trabajos de control y análisis de datos en la biblioteca del observatorio, y bromas, por las cimas de Calar Alto, a 2200 m de altura.